Capítulo 1 - Mi Whitepaper Personal
¿Quién soy y por qué estoy haciendo esto?
No es fácil resumir 27 años de carrera en unas cuantas páginas. He vivido muchas etapas, he trabajado en mundos muy distintos, he tomado decisiones que en su momento parecían contradictorias, y he aprendido a reinventarme más de una vez.
Empecé como abogado. Luego me sumergí en el mundo de la publicidad, el entretenimiento en vivo, la consultoría política, la comunicación estratégica, la consultoría empresarial, la inteligencia social y la tecnología. He tenido la oportunidad de asesorar a líderes de alto nivel, fundar proyectos ambiciosos, formar equipos brillantes y también equivocarme muchas veces en el camino.
Durante mucho tiempo, medí mi valor a través de resultados: campañas ganadas, clientes importantes, facturación, reconocimientos. Y sí, todo eso me dio herramientas, experiencia y una reputación sólida. Pero también me desconectó de mí.
Hasta que un día, esa desconexión ya no pudo ignorarse.
Durante años viví en automático, atrapado en el deber ser. Trabajando sin parar, liderando equipos, tomando decisiones importantes… pero sin sentirme realmente alineado conmigo mismo. Lo tenía “todo”, pero sentía que me faltaba lo esencial: claridad, propósito, paz interior.
Después del cierre de uno de los capítulos más exigentes de mi vida profesional en 2022, dediqué todo 2023 y 2024 a un nuevo proyecto: una plataforma tecnológica cuyo propósito era empoderar a los creadores a convertirse en empresarios digitales exitosos, buscando resolver muchos de los problemas que enfrentamos con Trendzyla y que nos llevaron a su cierre.
Durante dos años me volqué por completo a ese sueño: diseñamos la arquitectura, desarrollamos el prototipo, hicimos validaciones reales con usuarios, y estructuramos todo como una startup con potencial de crecimiento global.
Pero a inicios de 2025, mi socio tecnológico —la pieza clave que convertiría ese prototipo en un MVP funcional— me comunicó que, por motivos personales, no podía continuar. Fue un momento inesperado. Un quiebre real.
Uno de esos puntos donde el universo te obliga a mirar hacia dentro y a preguntarte, con brutal honestidad:
¿Esto es lo que realmente quiero seguir construyendo?
Afortunadamente, mi proceso de evolución personal ya había comenzado. Ya tenía CREATE tatuado en mí. Seguía aprendiendo de grandes maestros, mentores y de mi coach.
Y ahí lo vi claro.
Mi propósito no necesita código. Mi visión no depende de una plataforma tecnológica. Lo que verdaderamente quiero crear está en mí. Lo que sí puedo liderar, ejecutar y sostener con todo lo que soy, es mi plataforma humana.
Tomé una decisión. Hablé con mi equipo. Y puse ese proyecto en pausa.
No como una renuncia. Sino como un acto de coherencia. Porque entendí que el siguiente paso en mi camino era otro. Era este.
Convertirme en creador.
Crear una marca personal.
Construir un podcast que sirva de espejo y canal de aprendizaje.
Desarrollar una metodología profunda, viva, replicable.
Compartir desde mi historia.
Aprender de otros.
Y acompañar a una nueva generación de creadores a convertirse en empresarios conscientes, estratégicos y con propósito.
Estoy haciendo esto porque creo profundamente que el mundo necesita más personas viviendo alineadas con lo que vinieron a crear.
Porque me emociona pensar en el impacto exponencial que podemos generar cuando una persona decide tomar control de su narrativa, de su negocio, de su tiempo y de su energía.
Ese es mi compromiso. Conmigo. Y con cada persona que resuene con esta visión.
Este whitepaper personal es la base de todo eso. Un manifiesto. Una hoja de ruta. Un mapa de expansión.
Y si tú estás leyendo esto, es porque quizá también estás listo para dejar de sobrevivir…
y empezar a crear con alma.


